lunes, 10 de febrero de 2014

El Poder de la Bendición. Números 22

Bendición, es mucho más que tan solo decir bien o hablar bien. La bendición tiene el poder de proteger. La bendición es una forma de vida fructífera, la bendición es la que nos permite gobernar.
Nosotros somos bendecidos desde el momento de la creación. Génesis 1: 28 “los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
La bendición de Dios es la que nos permite luchar por cada día ser mejores.
Pablo nos dice que nosotros somos benditos con toda bendición. Efesios 1: 3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,
Dios nos dio el poder de bendecir o maldecir. Deuteronomio 30: “Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal;” es por esta razón que Balac manda a llamar a Baalam . Números 22: 6 “Ven pues, ahora, te ruego, maldíceme este pueblo, porque es más fuerte que yo; quizá yo pueda herirlo y echarlo de la tierra; pues yo sé que el que tú bendigas será bendito, y el que tú maldigas será maldito.
Hay muchas razones que pueden llevar a la gente del mundo a querernos maldecir. Una de ellas es la envidia de vernos bendecidos por Dios. V 3 “Y Moab tuvo gran temor a causa del pueblo, porque era mucho; y se angustió Moab a causa de los hijos de Israel.
Lo maravilloso de todo esto es que no importa cuántas veces nos maldigan todo su esfuerzo será en vano ya que al que Dios bendice nadie lo puede maldecir. V 12 “Entonces dijo Dios a Balaam: No vayas con ellos, ni maldigas al pueblo, porque bendito es.
Cualquiera que se atreva a proferir maldición contra un hijo de Dios su castigo es la muerte si no se arrepiente. V 33 “El asna me ha visto, y se ha apartado luego de delante de mí estas tres veces; y si de mí no se hubiera apartado, yo también ahora te mataría a ti, y a ella dejaría viva.
Desde un principio Dios nos bendijo y aunque nos apartamos de el por causa del pecado ahora con Jesucristo volvemos a estar en bendición. 1 Pedro 3: 9 “no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición
Las maldiciones del hombre no nos deben preocupar por que jehová nos protege, debemos preocuparnos por las maldiciones de Dios.
La única forma de cuidarnos de las maldiciones de Dios es conociéndolas y para esto es necesario leer la palabra de manera completa, Con bendiciones y maldiciones Josué 8: 34-35 “Después de esto, leyó todas las palabras de la ley, las bendiciones y las maldiciones, conforme a todo lo que está escrito en el libro de la ley.  8:35 No hubo palabra alguna de todo cuanto mandó Moisés, que Josué no hiciese leer delante de toda la congregación de Israel, y de las mujeres, de los niños, y de los extranjeros que moraban entre ellos.” hoy en día muchos cristianos solo han oído de las 33.000 promesas de bendición que dicen hay en la biblia, y se olvidan de que las maldiciones también son promesas.
Es la palabra de Dios la que nos corrige y nos orienta. 2 Timoteo 3: 16 - 17 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,  3:17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
Para poder ser orientados por Dios es necesario conocer su voz. Samuel era un siervo de Dios ya estaba ministrando pero a pesar de eso el no conocía la voz de Dios. 1 Samuel 3: 7 “Y Samuel no había conocido aún a Jehová, ni la palabra de Jehová le había sido revelada.” el motivo para no estar familiarizado con lo vos de Dios era  que la palabra cada día escaseaba. 1 Samuel 3: 1 “El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia.

La bendición de Jesucristo nos cubre no te preocupes por lo que la gente quiera hacerte. Toda maldición que el hombre profiera en contra tuya, Jesucristo la convierte en bendición.

      


Contribuye con nuestro ministerio. Con tu ofrenda podemos llegar a más personas con el evangelio de salvación. CONTÁCTANOS.